(CNN) – Hillary Clinton llamó a la proliferación de noticias falsas “una epidemia” hablando en público el jueves, en una de sus primeras apariciones desde que perdió las elecciones presidenciales.
Las noticias falsas, que expanden teorías de la conspiración y encuentran una gran caja de resonancia en internet, se volvieron prominentes en torno a la campaña electoral de 2016 y desde entonces millones han leído sobre el “Pizzagate”, una teoría falsa que decía que Hillary Clinton y su jefe de campaña John Podesta lideraban una red de abuso sexual de menores en una pizzería en el centro de Washington.
Clinton dijo que la propagación de noticias falsas, que “inundan las redes sociales”, es una tendencia que “puede tener consecuencias en el mundo real”.
Clinton no mencionó el “Pizzagate”, pero sus comentarios parecían hacer referencia directamente a la noticia falsa, que llevó a un hombre con un rifle de asalto a la Comet Ping Pong, la pizzería de Washington.
“No se trata de la política o de partidismo. Hay vidas en riesgo, la vida de la gente común que simplemente trata de hacer su trabajo, contribuir con sus comunidades”, dijo Clinton. “Es un peligro que debe ser abordado rápidamente.
Clinton también habló con el dueño de Comet Ping Pong, de acuerdo con uno de sus colaboradores. Una portavoz del propietario, James Alefantis, dijo sin embargo que no habló ni recibió contacto de Clinton.
Clinton respaldó “la legislación bipartidista” que busca dar al Congreso más poder para responder a la “propaganda extranjera”, una aparente referencia al papel de Rusia en la financiación de algunas de las noticias falsas, según dos estudios, con el objetivo de influir en la política estadounidense.
“Es imperativo que los líderes tanto en el sector privado como en el sector público protejan nuestra democracia y las vidas inocentes”, dijo Clinton.
Desde su derrota, Clinton se ha mantenido lejos de las luces públicas, pero a menudo se ha visto en los alrededores de su casa en Chappaqua, Nueva York.
En el jueves participó en un homenaje a Harry Reid, quien anunció su retiro tras casi 30 años en el Senado.
Clinton bromeó con que su discurso en homenaje a Reid “no era exactamente el discurso en el Capitolio que espera dar después de la elección”.