Smartmatic, la empresa a cargo del sistema de voto electrónico empleado en las elecciones a la Asamblea Constituyente de Venezuela, denunció este miércoles que “hubo manipulación del dato de participación”.
El director ejecutivo de la compañía, Antonio Mugica, afirmó que Smarmatic estimaba “la diferencia entre la cantidad anunciada y la que arroja el sistema es de al menos un millón de electores“.
En una conferencia de prensa convocada en Londres, Mugica aclaró que por el momento no podían precisar el número exacto.
“Una auditoría permitiría conocer la cantidad exacta de participación”, aseguró Mugica, quien sin embargo no quiso comentar sobre el impacto de esa supuesta discrepancia para la validez de la elección.
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La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, tachó la denuncia de Mugica de “irresponsable” y “sin fundamento”, al tiempo que defendió la cifra reportada el domingo: un 41,53% de participación con 8 millones de venezolanos en las urnas.
Ante el boicot de la oposición, el conteo del nivel de participación se convirtió en el número clave con el que medir el apoyo con el que contaba la Constituyente impulsada por el gobierno de Nicolás Maduro.
La oposición había celebrado un referendo informal dos semanas antes en las que aseguró haber contado con más de 7,6 millones de votos en rechazo de la iniciativa de Maduro.
Smartmatic, una multinacional de origen venezolano, ha sido el proveedor de la plataforma tecnológica de votación y servicios para las elecciones en Venezuela desde 2004, incluyendo la elección del domingo para la Asamblea Constituyente.
Sin embargo, en el caso de la última votación no hubo presencia de auditores de la oposición, fundamentales como testigos del proceso, explica la firma, que tenía entre sus responsabilidades la totalización de los votos.
En el comunicado leído por Mugica en Londres se sugiere que las autoridades electorales de Venezuela simplemente decidieron ignorar el reporte de totalización de votos generado por el sistema de Smartmatic.
“Nuestro sistema automatizado está diseñado para evidenciar cualquier manipulación, pero deben existir personas observando el sistema y esperando por esas evidencias: los auditores”, explicó Mugica.
“En esta elección no hubo auditores de la oposición porque ésta no participó”, agregó.
Antes del anuncio de Smartmatic, varios países ya habían dicho que no van a reconocer el resultado de los comicios del domingo, que fueron boicoteados por la oposición venezolana.
La oposición ya había estimado la participación en los comicios en únicamente el 12,4% del padrón electoral, es decir, unos 2,4 millones de electores.
Después del anuncio, el presidente de la Asamblea Nacional y líder opositor Julio Borges señaló que lo dicho por la compañía confirma las denuncias opositoras.
“Es un terremoto a nivel mundial, porque lo que se venía diciendo a gritos viene a tener confirmación completa. Smartmatic ha declarado que tiene la data dura incontrovertible según la cual las elecciones de la Constituyente no fueron sólo un fraude por la convocatoria, sino que todos los resultados que leyó el CNE esa noche son absolutamente fraudulentos”.
“Sin lugar a dudas los rectores del CNE son sujetos de un delito que es adulterar el resultado electoral”, afirmó Borges.
El parlamentario anunció que un grupo de diputados se dirigirá al Ministerio Público a pedir que se abran “investigaciones penales porque lo que ha ocurrido es un delito que comienza por la misma cabeza del órgano electoral”.
“Esto constituye una razón más para seguir luchando”, dijo Borges, que pidió más ayuda a la comunidad internacional.
La presidenta del CNE descalificó la declaración del jefe de Smartmatic por considerar que se trataba de una “opinión sin precedentes”.
“Es una aseveración irresponsable con base en estimaciones sin fundamento en la data que maneja exclusivamente el Poder Electoral”, afirmó Lucena en una declaración a medios.
“No es una empresa privada radicada fuera del país la que garantiza la transparencia y credibilidad del sistema electoral venezolano”, sentenció.
“Su único rol es la de proveer ciertos servicios y soporte técnico que no son determinantes en sus resultados”.
“No les iba a gustar”
El gobierno de Venezuela, sin embargo, ha defendido la legitimidad de la nueva asamblea, que tiene como misión redactar una nueva Constitución y se espera ordene la disolución del actual parlamento, controlado por la oposición.
BBC Mundo le preguntó director de la firma, el venezolano Antonio Mugica, si había discutido sus hallazgos con el gobierno de Venezuela y las autoridades electorales, y -después de una larga pausa- el ejecutivo respondió negativamente.
“Pasamos los dos últimos días asegurándonos de que esto que estamos diciendo es verdad, que es preciso”, dijo.
“No sentimos que alertar a las autoridades del CNE antes de hacer esta declaración fuera lo correcto”, explicó.
Luego elaboró: “Pensamos que a las autoridades no les iba a gustar lo que teníamos para decir“.
Y según el periódico venezolano El Nacional, una veintena de técnicos de Smartmatic abandonaron Venezuela poco antes de la conferencia de Mugica.
Interrogado sobre la credibilidad de sus señalamientos, Mugica dijo que los números estaban ahí para quien quiera analizarlos.
“Lo que nosotros podemos asegurar, sin ninguna duda, es que las cifras oficiales y las que arrojó el sistema no concuerdan“, insistió Mugica.
Las controversias de Smartmatic
Entre 2004 y 2015 Smartmatic ha participado en 14 elecciones, estableció más de medio millón de máquinas para votar y procesó más de 377 millones de votos en Venezuela, según información provista por la empresa.
Pero la empresa, que afirma haber ayudado a millones de votantes a depositar más de 3.700 millones de votos en elecciones en todo el mundo, no es ajena a las controversias.
En la propia Venezuela, la oposición en su momento denunció que el sistema no había evitado irregularidades durante el referendo revocatorio de 2004, pero el proceso fue validado por observadores electorales de la Unión Europea, el Centro Carter y la Organización de Estados Americanos (OEA).
Y candidatos perdedores también denunciaron fraude en comicios manejados por Smartmatic en Filipinas.
Esta, sin embargo, es la primera vez que la compañía entra en contradicción con las autoridades electorales de un país.
Nacida en Venezuela, pero ahora con sede en Londres, Smartmatic fue acusada en sus orígenes de tener vínculos demasiado estrechos con el ahora fallecido presidente venezolano Hugo Chávez.
Pero dada su cada vez mayor presencia internacional, la empresa puede haber decidido que su credibilidad es mucho más importante que cualquier vínculo que haya podido tener con la Revolución Bolivariana.
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