Banderas de México, piñatas y muñecos con la imagen de Donald Trump recibieron este viernes al precandidato republicano antes de su participación en la convención del Partido Republicano de California en Burlingame, cerca de San Francisco.
Cientos de personas se congregaron frente al hotel donde se celebra la convención para mostrar su rechazo hacia Trump, quien lidera la carrera por la nominación de su partido para las elecciones presidenciales del 8 noviembre en EE.UU.
Agentes del servicio secreto escoltaron a Trump, que tuvo que cruzar una carretera a pie para poder entrar en el edificio por una entrada lateral.
“Sentí como si estuviera cruzando la frontera”, dijo Trump al comenzar su intervención en la convención, que se retrasó más de una hora.
El multimillonario señaló que los miembros de los servicio de seguridad le propusieron que diera la vuelta y regresara al estado de Indiana pero no aceptó, porque, según dijo, “no podía decepcionar a sus seguidores”.
Choques violentos
Las protestas de este viernes no fueron tan violentas como las del jueves, cuando partidarios y oponentes de Trump chocaron mientras el precandidato ofrecía un mitin a su llegada a California.
Los manifestantes bloquearon el tráfico en Costa Mesa, en el condado de Orange, y la policía arrestó a al menos a 17 personas.
El motivo principal de las protestas es la posición de Trump respecto a los inmigrantes, especialmente los mexicanos, y su promesa de deportar a millones de indocumentados si llega a la presidencia.
Sus propuestas han generado gran oposición en algunas zonas de California, en particular entre los mexicanos que residen en el estado.
La periodista de BBC Mundo en Los Ángeles, Beatriz Díez, señala que, durante los choques del jueves, los partidarios de Trump gritaban “¡Construye ese muro! ¡Construye ese muro!” en referencia a la promesa de Trump de construir un muro en la frontera entre EE.UU. y México que además sería financiado por el gobierno mexicano.
La tensión degeneró en el lanzamiento de piedras a conductores mientras otros manifestantes se subieron a un auto de policía, rompiendo los vidrios.
Figura que polariza
El magnate no pareció perturbado por los disturbios y, después de su discurso, tuiteó: “¡Gracias Costa Mesa, California! 31.000 personas esta noche y miles que no pudieron entrar. ¡Volveré! #Trump2016”.
La campaña de Trump ha estado marcada por la violencia entre sus partidarios y oponentes.
El hecho más destacado ocurrió en la Universidad de Illinois, Chicago, el 11 de marzo.
Ese día el mitin tuvo que ser suspendido tras estallar varias peleas dentro el auditorio.
Tal como se están desarrollando las primarias, California se ha convertido en el premio más grande para los candidatos republicanos en la carrera por la nominación.
Las primarias de este estado son el 7 de junio.
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