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Todavía queda un mes para que termine un 2014 bastante convulso, pero periodista precavido vale por dos (que tampoco es mucho; tres cuartos de ingeniero) y preferimos comenzar ya nuestro repaso al año. Eso sí, un repaso peculiar. Que, con 25 años, todavía estamos en esa edad en la que pensamos que salir a chupitos de Jagger es una buena idea. Nos ponemos la gorra hacia atrás, las gafas de sol y la chupa del Zara y comenzamos este resumen en emojis. Somos jóvenes.

Comenzamos este repaso con una noticia de rabiosa actualidad. No porque muerda -que no sabemos- sino porque ha sido portada en las últimas semanas: la entrada en prisión de Isabel Pantoja. La tonadillera fue condenada a dos años de cárcel por blanqueo de capitales y no precisamente porque pintase Madrid de blanco.

También han sido noticia recientemente los viajes a Canarias de José Antonio Monago, presidente de la Junta de Extremadura que se tomó muy en serio aquello de que no se le pueden poner barreras al amor.

El personaje del año -e, incluso, de la década- es el gran Nicolás, el Tom de MySpace de la política nacional, con una agenda con más números que el lotero de Fabra.

A nivel nacional, 2014 será recordado como el año en el que el Rey Juan Carlos abdicó. La sucesión fue bastante menos compleja -y bastante más aburrida- que en Juego de tronos y Felipe tomó las riendas del país.

Otros que se despidieron del trono fueron los jugadores de la selección española, que cayó en el Mundial celebrado en Brasil. Contra Holanda no solo cayó, sino que también calló, ya que el 1-5 encajado nos dejó sin palabras.

En el apartado de necrológicas hubo dos muertes tan reseñables como cercanas. La primera fue la de Emilio Botín. El presidente del Banco Santander falleció el 10 de septiembre de un infarto, a los 79 años.

Poco después tuvo lugar el fallecimiento del presidente de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, también a los 79 años y también en septiembre, en este caso el día 14 y tras pasar varios días ingresado por una insuficiencia respiratoria.

Cerca de 2,5 millones de personas participaron en la consulta catalana, en la que el Sí/Sí que apoyaba la independencia se impuso con un 80,72% de los votos, frente al 10,11% del Sí/No y el 4,55% del No.

La corrupción -así, en general- ha sido uno de los temas del año. Y del pasado. Y del anterior. Casos aislados de aquellas personas de las que usted me habla que no representan al partido, del mismo modo que no lo representaban las 10 anteriores. Ni las siguientes.

Uno de los escándalos más sonados fue el de las tarjetas B que varios directivos de Caja Madrid utilizaron para gastos personales. Más de 15 millones de euros en gastos personales que van desde vuelos a heladerías o comidas en el Vips. Que ya hay que ser cutre, por otro lado.

Alfredo Pérez Rubalcaba, como Laura, se fue. Su relevo fue Pedro Sánchez, que se propuso renovar el PSOE y ya ha tomado medidas respecto a lo más urgente: las vocales.

Las prospecciones en Canarias (que hemos tenido que representar con un volcán, porque, sorprendentemente, no hay un emoji de una isla) han sido criticadas por parte de la sociedad, que se opone tanto a los propios sondeos como a la respuesta de la Armada, que terminó con una activista de Greenpeace operada de urgencia en el Hospital de Las Palmas.

Pablo Iglesias entró en la escena política nacional como un tornado de elefantes (elephantnado ©) en una castarrería (©). Con cinco eurodiputados (el propio Iglesias, Teresa Rodríguez-Rubio, Lola Sánchez, Pablo Echenique y Tania González), el partido ahora prepara el asalto a unas elecciones generales en las que podría ser la tercera fuerza. O la segunda. O hasta la primera, según algunas encuestas.

En el sector tecnológico por fin llegó el anuncio del Apple Watch, el reloj inteligente de la compañía. A pesar de que, según los rumores, lleva años madurando en los manzanos de Cupertino, aún no tiene fecha exacta de lanzamiento.

La historia de la llegada del ébola a España tuvo una heroína, un mártir canino y una incompetente devenida en ministra dimitida por un escándalo de corrupcion. Y un Jaguar.

Y hablando de no ver cosas que tenemos en el garaje, la infanta Cristina fue imputada de dos delitos fiscales por el ‘caso Nóos‘, aunque finalmente no por blanqueo de capitales.

A pesar de que dejó la Presidencia de la Comunidad de Madrid en 2012, Esperanza Aguirre ha dejado varios titulares a lo largo de 2014. Uno de los más sonados fue su momento Thelma (o Louise) en abril de este año.

Servidor, que tiene serios problemas para aparcar en batería, todavía se maravilla al pensar que la ESA consiguió aterrizar el robot Philae en el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.

La Décima llegó gracias a un gol de Sergio Ramos de cabeza y casi en el minuto 93. Este tanto supuso el empate y llevó el partido a una prórroga en la que el Atleti, como la sonda del punto anterior, se había quedado sin pilas.

Al menos los rojiblancos dieron la cara durante más de 90 minutos, que no es algo que se pueda decir de un Brasil que fue aniquilado (1-7) por Alemania en su choque en las semifinales del Mundial. Para Pelé la derrota fue peor que el Maracanazo.

La reforma de la Ley de Propiedad Intelectual trajo consigo el ‘canon AEDE’, también conocido como ‘tasa Google’ o, en determinados círculos, “yo casi quitaría de ahí ese botón de compartir en Menéame”.

Otro que nos dejó en 2014 fue Gabriel García Márquez. 100 años de soledad literaria y 100.000 obituarios con la palabra Gabo.

El año comenzó con la compra de WhatsApp por parte de Facebook y terminó con el temido y odiado doble check azul. Tan temido y tan odiado que la compañía solo tardó una semana en lanzar una actualización que permitía desactivar la función.